Teresa tiene sólo 15 años cuando es expulsada de la casa de su padre. Está embarazada y se casa, pero poco tiempo después, quedará sola nuevamente. La chica conocerá amigos que le enseñan a robar. Justo en su primer robo, la arrestan y la envían a prisión. Luego de muchas otras detenciones, de una tentativa de suicidio y de tres hombres, Teresa decide parar de robar. Pero sus buenas intenciones son inútiles porque ella -si quiere sobrevivir- no puede renunciar a su trabajo...