Sylvia es trabajadora social que lleva una vida sencilla y estructurada: su hija, su empleo y sus reuniones de Alcohólicos anónimos. Sin embargo, su vida dará un vuelco cuando, tras una reunión
de antiguos alumnos del instituto, Saul la sigue a casa. Este inesperado reencuentro tendrá profundos efectos en ambos y abrirá la puerta a su pasado.